CUARESMA
Llamamos Cuaresma a los 40 días anteriores a la fiesta de la Pascua de Resurrección.
Durante estas semanas Dios nos llama especialmente a convertirnos de nuestros pecados y a vivir como verdaderos discípulos de Jesús.
La conversión no depende de nosotros, se la tenemos que pedir al Señor.
El Señor cambia mi corazón de piedra en corazón de carne, hazlo sensible y compasivo, capaz de estar cerca del que sufre y que sepa darse a los demás, un corazón como el tuyo.
Señor cambia mi orgullo en humilde servicio... mi codicia en generosidad... cambia nuestros miedos en fe... nuestros sufrimientos en sacramentos: Tú puedes convertir nuestro sufrimiento en un signo de tu presencia. Asúmelo como algo tuyo. Entonces el sufrimiento se convertirá en fuente de Gracia y me unirá más fuertemente a Ti.
La cuaresma es tiempo para crecer en el amor, la paciencia, la libertad, en la cercanía a Ti y a los hermanos.
Explicamos con un árbol que es en este tiempo cuando más tenemos que cuidarnos, es el momento de la “poda”, debemos quitar de nosotros, de nuestros corazones todo lo malo, el odio, el rencor, el pelearnos con otros, la pereza, comodidad, no hacer caso a nuestros padres, abuelos, profesores,... Debemos hacer nuestras las virtudes del amor, paciencia, bondad, alegría, etc.
Dar una idea sobre lo que celebramos en la SEMANA SANTA:
*Domingo de Ramos: celebramos la entrada de Jesús en Jerusalén. La gente salió a recibirlo con palmas y muchos hombres y niños le bendecían, llenos de gozo diciendo: “¡Bendito el que viene en nombre del Señor!” “¡Hosanna! (Lc. 19, 36-38; Lc. 19, 29-40)
*Jueves Santo: los cristianos llamamos Jueves Santo al día en que celebramos el recuerdo de la Última Cena de Jesús con sus apóstoles, cuando fundó la Eucaristía (Jn. 13, 1-15)
*Viernes Santo: Celebramos el recuerdo de la Pasión y Muerte de Jesús. (Jn. 18, 19-42)
La Santa Cruz es la señal del cristiano porque en la Cruz murió Jesús por amor a nosotros, para salvarnos a todos los hombres y darnos una vida nueva.
*Domingo de Pascua de Resurrección: es la gran fiesta de los cristianos porque celebramos la Resurrección de Jesús. Es la fiesta más grande de la Iglesia. )Lc. 24, 1-12; Lc. 24, 34)
En cada Eucaristía nos reunimos para hacer lo que Jesús hizo en la Última Cena y alegrarnos porque sabemos que Él ha resucitado.